Liverpool lo sufrió sobre la parte final, pero pudo sostener el 1-0 de Mohamed Salah para ganarle al siempre duro Brentford en Anfield. Triunfo importante para el equipo de Jürgen Klopp, su sexto de manera consecutiva, para afianzarse en el Top 5, aunque sueña con meterse a la próxima Champions League.
Victoria trabajada de los Reds y con algo de sufrimiento en la parte final, pero lo importante es sumar de a tres puntos para seguir soñando con la próxima Champions, aunque la misión sigue siendo difícil. Las Abejas, por su parte, lo intentaron hasta el final, pero se quedaron con las manos vacías y se alejan de la chance de clasificar a algún torneo internacional.
Los Reds sorprendieron con una alineación bien ofensiva, poniendo a Gakpo, Salah, Jota y Darwin Núñez. Lo bueno es que, por momentos, conectaron bien, aunque muy lejos de lo que realmente se espera de tener tantas grandes figuras. Aún así, le alcanzó para quebrar la valla de David Raya a comienzos de la primera mitad.
Al minuto 13 de juego, un buen centro desde tres cuartos al área de Fabinho para la entrada de Van Dijk terminó con el gol de Mohamed Salah. Tanto número 100 en Anfield para el egipcio, quien también llegó a los 186marcados en su totalidad con Liverpool, igualando la marca de Steven Gerrard.
El equipo de Klopp tuvo otras chances de peligro para aumentar la ventaja. Darwin Núñez tuvo su oportunidad de todos los partidos, pero no pudo marcar. Así extendió su mala racha, ya que lleva un gol en los últimos 11 encuentros que disputó (contando todas las competencias). Las críticas continuarán para el uruguayo, por quien se esperaba mucho más cuando fue fichado el pasado verano.
Brentford fue más cauteloso en la primera mitad y un poco más agresivo en la segunda. Anotó un tanto antes del entretiempo a través de Bryan Mbeumo, pero fue anulado por offside a instancias del VAR. En la segunda mitad, no tuvo tantas chances de peligro, pero sí lo peleó más.
Gakpo tuvo el 2-0 abajo del arco para sentenciar el triunfo y darle tranquilidad a todo Anfield sobre la mitad del segundo tiempo en la jugada más clara de Liverpool. Sin embargo, en vez de definir, despejó el balón y le siguió dando vida a la visita.
Sobre el final, algunas pelotas paradas pusieron en riesgo la portería de Alisson, incluso con las subidas de David Raya, de buena tarea pese a la derrota con un par de atajadas importantes, pero no pudo ser para Brentford. Liverpool respira y se saca de encima a un rival siempre difícil.
