Su esposa, Sandra Sierra, fue la encargada de subir al escenario en la majestuosa ceremonia de homenaje póstumo, para recibir los cientos de aplausos de los asistentes y un trofeo que acredita a Calero como miembro del club de máximos ídolos en la historia de los ‘tuzos’.

Pero, sin duda, el momento más emotivo de la gala se dio durante la presentación de un video con algunas imágenes de Miguel y una música muy sentimental, que hicieron llorar a varios, entre ellos a Juan José Calero, hijo del exfutbolista.

 

 

“Es un honor, ya que mi flaco anhelaba ser parte del Salón de la Fama; hoy nos acompaña desde allá arriba, me parece verlo con su hermosa sonrisa y esa alegría”, fueron algunas de las palabras de la viuda, que hicieron aún más nostálgica la ceremonia.

Con Pachuca, Miguel Calero fue campeón de cuatro ligas mexicanas, tres Copas y una Liga de Campeones de la Concacaf, a la vez de una Superliga Norteamericana.