A tres días de la final de la Copa Libertadores, El País publicó una entrevista con Rodolfo D'Onofrio, quien ya está en Madrid, España.

El presidente de River destacó que se pone de la vereda de enfrente de los barrabravas y hasta confesó que recibió aprietes tras el sábado 24 de noviembre, cuando fue la agresión al micro visitantes en los alrededores del Monumental.

"Tengo 200 ó 250 hinchas de Boca que dicen que me van a matar", aseguró D'Onofrio, quien agregó que recibe al apoyo de los fanáticos millonarios todo el tiempo.

Por otra parte, el dirigente hizo una desafortunada comparación al hablar del episodio del sábado 24 de noviembre: "Quiero que lo que ocurrió ese sábado sea el 11 de septiembre de Argentina. Pero tienen que poner las pelotas el Gobierno nacional y los directivos. Tenemos que hacerlo de forma conjunta, cada uno solo no se puede", en relación alrededor de la barra.