A lo largo de su historia, los Lakers han contado con la presencia de glorias del deporte como George Mikan, Elgin Baylor, Magic Johnson, Kareem Abdul-Jabbar, Wilt Chamberlain, Kobe Bryant y Shaquille O’Neal.

Evidentemente, esto le da un peso adicional a vestir la camiseta de la franquicia angelina, que siempre ha estado ligada con la grandeza, a pesar de los últimos años difíciles que ha debido atravesar.

Es por eso que, de acuerdo con Kyle Kuzma, jugar para los Lakers requiere otro tipo de fortaleza mental de la que simplemente la mayoría de los jugadores carecen, y por eso es algo tan exclusivo:

“No todo el mundo está hecho para ser un Lakers. Es un poco más difícil que jugar en cualquier otro equipo por todo el escrutinio. Personalmente he estado listo para ser un Lakers desde el día que llegué. Me puse la gorra del equipo y empecé a trabajar, es algo que definitivamente no es para todo el mundo, pero mentalmente debes estar a cierto nivel”.

Kuzma es el único restante del núcleo joven de jugadores de los Lakers, que se desprendieron de Julius Randle y D’Angelo Russell y luego traspasaron a Josh Hart, Lonzo Ball y Brandon Ingram.

Ahora, deberá responder a la confianza de la gerencia dando un paso al frente y ayudando a LeBron James a llevar al equipo de vuelta a lo más alto, poniendo punto final a su racha sin llegar a los playoffs.