Desde hace algunos años, LeBron James es el atleta más reconocido de Nike, que terminará pagando casi un millardo de dólares por sus servicios al finalizar uno de los contratos más impresionantes de la historia.
Sin embargo, Brian Windhorst reveló en su libroLeBron, Inc.: The Making of a Billion-Dollar Athlete, el Rey de la NBA estuvo muy cerca de firmar con Reebok poco antes de rubricar dicho contrato con Nike.
Justo cuando salió de la secundaria, Reebok fue sumamente agresivo en su oferta por firmar al Rey, ofreciéndole 100 millones de dólares y un cheque de 10 millones que podría cobrar de inmediato. Adidas, por otra parte, le había ofrecido “solo” 60 millones, mientras que Nike llegó a ofrecer 87.
Tras verlo dudar, Reebok aumentó su oferta hasta los 115 millones, pero, de acuerdo con Windhorst, LeBron no quería firmar con esta marca porque Shawn Kemp había declarado que eran “desechables”.
“LeBron había considerado seriamente firmar con Reebok por un par de semanas, pero no quería hacerlo. No le gustaban sus zapatos y siempre se había imaginado usando Nike y protagonizando grandes campañas con sus diseñadores”.
16 años después, LeBron se convirtió en un estandarte de Nike dentro y fuera de los tabloncillos, y es una locura imaginárselo utilizando cualquier otra marca deportiva.
