Zion Williamson no es un joven cualquiera. Gracias a su talento y su portento físico, ya tiene las condiciones para medirse cara a cara con algunos de los baloncestistas más potentes del mundo.

Es por eso que, a pesar de que ni siquiera se ha declarado para el Draft de la NBA y no ha jugado un segundo como profesional, la federación norteamericana planea invitarlo a representar al equipo de los Estados Unidos en el próximo mundial FIBA a disputarse en China.

Tal como ya lo hiciera Anthony Davis en 2012, Williamson podría ser el próximo jugador recién salido de la universidad en tener el honor de vestir las barras y estrellas.

Evidentemente, para esto, deberá declararse como elegible para el próximo Draft de la NBA y firmar con un agente para poder negociar los términos de cualquier acuerdo potencial.

Williamson dominó por completo con la Universidad de Duke y aunque su sueño en el March Madness terminó prematuramente, es casi un hecho que será tomado con la primera selección global del próximo Draft.