Pocas emociones hubo en Mendoza, pero también hubo grandes joyas individuales: una de Chávez y otra de Martínez para contagiar al público.
Si el fútbol se trata de un mero espectáculo, el público de sala hubiese abandonado enojada y en tumulto el Estadio Minella, primero, y el Malvinas Argentinas, después.
No obstante, con sólo dos goles -de penal- en dos encuentros, los caños, túneles, como quiera llamarlos, hicieron saltar al hincha. Este sábado, Andrés Chávez fue quien abrió el duelo con una simple y estética pisada ante Nacho Fernández.
Minutos después, contagiado por el delantero rival o por el ambiente, Gonzalo “Pity” Martínez también dio que hablar con un gran caño a Adrían Cubas, quien terminó en el suelo sin pelota y en rídiculo.