Lluvias, lluvias y más lluvias. Así se desarrolló gran parte del sábado en Buenos Aires. Como consecuencia de ello, la primera final de la Copa Libertadores de América entre Boca y River se suspendió.
Las autoridades responsables tomaron la decisión drástica de reprogramar el tan importante compromiso para este domingo a la 16 horas, también en la Bombonera. ¿Pero se apuraron en suspender el juego?
Es que a las 17 horas, momento en el que el duelo entre los equipos de Guillermo Barros Schelotto y Marcelo Gallardo debía arrancar, las lluvias son muy débiles y el campo de juego luce en buenas condiciones.
Resta esperar como continúa desarrollándose el clima en Buenos Aires, pero da la sensación de que el compromiso, al menos, podría haber arrancado en el estadio de Boca Juniors.
Por su parte, Daniel Angelici, presidente del elenco anfitrión, aseguró: "La cancha estaba bien, hablé con el canchero. Hace tiempo que venimos haciendo trabajos, pero cayeron 110 milímetros y no es normal. Además había muchas calles anegadas. La decisión fue correcta".
