Después que terminó el partido, los jugadores de Barcelona estaban como locos con un limón, el amuleto de la suerte. ¡Estaban re manijas!

Cuando terminó el encuentro en el Camp Nou, todos los jugadores de Barcelona se volvieron locos para celebrar la histórica conquista ante Paris Saint Germain.

Sin embargo, hubo un invitado especial a la fiesta. ¿Quién? ¡Un limón! Sí, Luis Suárez lo pasó por todos lados y Messi se puso muy feliz cuando lo vio.

¡Un insólito amuleto!