Rodolfo Pizarro, flamante refuerzo del Rebaño Sagrado, no tuvo problema en admitir que de niño le iba al América y hasta al Cruz Azul. No obstante, destacó que su familia siempre fue rojiblanca.
¿Honestidad brutal? En sus primeros días como jugador de Chivas, Rodolfo Pizarro tuvo una extraña confesión: su pasado azulcrema.
“Cuando era niño primero le iba al Cruz Azul, pasaron los años y me incliné por el América“, confesó sin problemas el nuevo refuerzo del Rebaño Sagrado.
Sin embargo, Pizarro ha sido una excepción en su familia, ya que todos son seguidores de Chivas y están eufóricos por su paso al conjunto rojiblanco.