Serio y hasta enojado, Gerardo Martino dijo que Ángel Di María y Nicolás Gaitán están a disposición y sentenció: “No podemos perder otra final”.

No dio certezas, pero sí indicios. Si bien no confirmó el equipo para la final de la Copa América ante Chile, Gerardo Martino reveló que, salvo Ezequiel Lavezzi y Augusto Fernández, todo el plantel está a disposición para el encuentro de este domingo.

Pero también dejó conceptos interesantes, al reconocer que estaría dispuesto a cambiar el estilo de juego que defiende en pos de que esta generación de jugadores consiga su primer título. “Esta vez dejaría el cómo a un costado, lo importante es el qué y que estos chicos se consagren, no por mí sino por ellos”, afirmó.

“La carga más grande era llegar a esta situación, más que jugar la final. Haberlo conseguido fue un gran logro y un gran peso liberado porque lo que buscábamos era llegar a este lugar. No cambia lo que pasó y el resultado. La final pasada ya pasó, es una nueva chance y una nueva posibilidad. La gente los futbolistas y nosotros queremos lo mismo, y estamos dispuestos a hacer un gran esfuerzo para cambiar lo que pasó el año pasado”, confesó el entrenador, que evitó hablar de la AFA y de las declaraciones de Messi.

Sobre cómo llegaban al partido destacó que “las dos selecciones llegamos bien y no vale la pena hacer la comparación con lo del año pasado”.

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