No ha sido un cierre de año fácil para James Rodríguez. Pareció, en algún momento, que terminaría por ganarse un lugar importante en el equipo, pero otra vez conspiraron las lesiones contra él.
Se acerca un nuevo mercado de fichajes y el futuro del colombiano es incierto. A favor suyo, para quedarse en Real Madrid, juega el cariño de los aficionados; aunque es el mismo que no le bastó a Keylor Navas para quedarse a pelear por un lugar.
Entre las contras se destaca la excasa participación que tuvo en el semestre, sumado al fastidio que generó en la directiva que pese a ello asistiera más de una vez a la convocatoria de la Selección Colombia cuando se había mostrado indisponible para Zidane.
Lo bueno es que, si hay algo que demostrar antes que comience el período de transferencias, James podría hacerlo dentro del terreno de juego, ya que tras quedar fuera de la convocatoria para El Clásico volvió a entrenarse este jueves a la par del grupo.
Claro que no son muchos los partidos que le quedan para hacerlo. Con el libro de pases todavía cerrado, podría ver minutos en el duelo de este fin de semana ante Athletic de Bilbao. Luego habrá parón por Navidad y, ya con el mercado en pleno transcurso, tendrá los partidos ante Getafe, Valencia, Sevilla y Valladolid; todos en enero.
Habrá que esperar para saber si llega por el colombiano un ofrecimiento que convenza al Real Madrid. Pretendientes no le faltan, pero de ahí a que paguen lo que pretende Florentino hay un largo trecho.