Partido muy trabado y de poco ataque el que se vivía en Alemania. Ni el Borussia Dortmund ni PSG podían llegar claramente al área del rival.
Nada parecía indicar que se iba a romper el cero, pero apareció el niño maravilla. Erling Haaland dijo presente para abrir el marcador.
Tras una gran atajada de Keylor Navas, el noruego aprovechó el rebote y la empujó. Pese al pedido de offside, el punta estaba perfectamente adelantado.
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Increíble lo de este joven de 19 años que no se cansa de convertir. Lo venían controlando los defensor del equipo parisino, pero se les escapó una vez y la mandó a guardar.
Borussia gana y mantiene el cero de local. Los dirigidos por Tuchel no hacen pie y casi ni llegar a incomodar a los locales.