La llegada del dinero de Oriente Medio a las islas británicas supuso un punto de no retorno para la Premier League. Se abre el debate por Reino Unido a la hora de hablar del futuro de los clubes estado y de que permisos podrían tener en un futuro no muy lejano. La política entra en juego y las peticiones ya son oficiales. FA y Premier, de la mano en lo que venga.
No es la primera vez que vemos como proyectos como los de Manchester City, Chelsea o Newcastle se encuentra bajo la lupa de los principales entes del deporte en Inglaterra. La procedencia de los millones gastados en fichajes, la relación con otros clubes por medio de la multipropiedad o las tramas que se cuecen alrededor de dichas entidades (Bin Salman-Turquía), han generado una brecha más que importante alrededor de un deporte que se plantea su futuro en Inglaterra sin los denominados clubes estado.
“Numerosos equipos de la Premier League han pedido al Gobierno Británico que impida que existan Clubes-Estado caso Newcastle o Manchester City. La solicitud se ha comenzado a debatir por parte de la FA y la Premier League”, la información de The Guardian que ya recorre el Reino Unido. La situación es más complicada de lo que parece.
Un arma de doble filo
Los problemas sobrepasan a Sky Blues o las Hurracas. Solo Tottenham supone un equipo de la Premier que no esté tomado por el dinero extranjero. Estados Unidos, el sureste asiático, Oceanía e incluso India aparecen alrededor de gigante que como Everton, Liverpool, Manchester United o incluso Arsenal, podrían ser considerados igualmente como entidades que no solo manejan intereses deportivos en las islas. El deseo de Qatar por llegar a Old Trafford desató ya todo tipo de especulaciones.
No es una decisión sencilla, apuntan desde The Guardian. Abrir la puerta de la expulsión de clubes estado supone por supuesto iniciar un debate sobre la procedencia de todo el dinero que llega a la Premier League por medio de esas juntas directivas en internacionales con las que cuenta el certamen. Se espera que a lo largo de los próximos meses, FA y Premier empiecen a desvelar que medidas se toman.