La crisis de Barcelona se profundizó este jueves con el empate sin goles ante Cádiz. Los comandados por Ronald Koeman tuvieron otro flojo rendimiento y, a pesar de que aún no perdieron en La Liga, se encuentra lejos de los líderes y la cabeza del entenador está en juego.
Sin bien el Barça pudo generar un puñado de jugadas claras en las que pudo haber anotado, el último toque fue un problema. Así, el conjunto culé sumó sólo un punto y se encuentra, hasta el momento, fuera incluso de la zona de clasificación a copas internacionales.
Sobre el cierre, Cádiz puso en serio peligro a Barcelona, acorralando a Marc-André Ter Stegen. El arquero alemán se convirtió en la figura del partido con buenas atajadas que evitaron el derrumbe del equipo de Koeman sobre el final del complemento.
En la última jugada, con el tiempo de adición cumplido, Cádiz estaba a punto de tirar un centro hacia el área de Ter Stegen, pero Segio Busquets frenó la acción de una forma cuestionable. Una pelota que estaba dando vueltas quedó dentro de la cancha y el mediocampista español la pateó hacia el delantero que estaba a punto de ejecutar el centro.