La Premier League ha consolidado un modelo sin precedentes en un fútbol europeo donde mientras el resto del continente sufre para llevar a cabo cualquier operación relacionada con el mercado, un recién ascendido a la primera división inglesa rompe con todo a base de talonario en las islas. Las últimos movimientos realizados desde LaLiga buscarán devolver el equilibrio.
“La Superliga ya existe y se llama Premier League”, dejaba caer hace no mucho Andrea Agnelli en una declaración que cada vez tiene más lógica. No por el deseo de independizarse del continente o por cambiar para siempre el organigrama del fútbol europeo, sino más bien por un mercado de fichajes donde los ingleses cuentan con cada vez más dinero incluso en tiempos post pandémicos.
Todo esto se debe a la venta de derechos de TV que han realizado desde hace años en Inglaterra para potenciar un producto con el que sus rivales ya no pueden competir. Mientras la Premier es vendida al resto por mundo por una suma cercana a los 3.600 millones de euros, LaLiga apenas llega a 800. El final de Santander como patrocinador de dicho torneo, un hecho clave para buscar más ingresos y competir en un mercado dominado por el Reino Unido.
Desbalance total
MARCA es quien desvela como Nottingham Forest, recién ascendido a la Premier League tras 23 años en el ascenso, se ha dejado ya en operaciones como las de Dean Henderson, Omar Richards, Giulian Biancone, Moussa Niakhaté, Neco Williams y Taiwo Awoniyi hasta 70 millones de euros que en España solo superan Real Madrid y Barcelona. Los otros 18 integrantes de LaLiga no llegan a inversiones que superen los 50 kilos.
La diferencia es aún más grande cuando vemos como Inglaterra ha fichado ya por 860 millones que serán imposibles de alcanzar en España. Apenas 250 millones se ha gastado toda LaLiga en una mercado de fichajes donde el dinero de las TV y el producto Premier League se come al resto de Europa. La primera división española, decidida a luchar contra este desbalance total.