Qatar Sports Investments, organización accionaria fundada en 2005, dueña del PSG y dominada por el Emir Sheikh Tamim bin Hamad Al Thani, se encuentra a horas de desembarcar en el Reino Unido para dar su primera oferta formal por Manchester United. Una nueva era asoma en el horizonte para los Red Devils, pero el tiempo apremia y quedan por resolverse diversas cuestiones antes de que el reloj llegue a cero.
¿Cuánto dinero traen desde Doha? ¿Cuánto piden los Glazer? ¿Compra total o parcial? ¿Hasta cuándo hay tiempo para cerrar todo? Las preguntas de una operación llena de aristas, donde la Premier League y sus entes de control deben avalar todo y donde solo un par de procedimientos separan a los Red Devils de convertirse en un nuevo club estado. Terminar con 18 años de era norteamericana en Old Trafford, máxima prioridad de una afición harta del manejo de un club sin títulos mayores desde el 2013.
Sky Sports y The Telegraph son quienes desvelan como después de varias reuniones telemáticas y gracias a los avances en las negociones, una serie de intermediarios cercanos a la familia real de Qatar ya viajan a Manchester para ofertar no por una parte, sino por la totalidad de un club valuado por sus dueños en 5000 millones de libras. Los jeques manejan en sus cuentas cerca de 370.000 ‘kilos’.
Todo antes del viernes
Por el Reino Unido desvelan que los Glazer buscarán que las ofertas que se reciban sean enviadas al banco comercial estadounidense Raine lleguen antes del viernes para que puedan comenzar a reducir a los contendientes serios para comprar el club. Sumado a esto, dicha fecha marca el final para poder asumir una transición en los despachos de la Premier donde solo entre los rumores y la llegada de Boehly al Chelsea, pasaron varios de desgobierno que no se quieren en Carrington.
Dicho cóctel se vive ahora mismo en Manchester, donde los hombres de Erik Ten Hag viven su mejor temporada en una década y donde en caso de luz verde desde Estados Unidos, los Red Devils pueden tener nuevo dueño para la próxima temporada. Otro club estado nace en la Premier League, donde repetimos tendrán la última palabra en cuanto la procedencia de los fondos de Qatar y donde ahora mismo se gestionan recursos para evitar lo que sería un choque de intereses en territorio UEFA.
El precedente Red Bull, a favor de Doha
Las normas del máximo ente del fútbol europeo son claras: Desde 1998 ha quedado prohibido que un mismo empresario sea dueño de dos clubes que se miden en la misma competición europea. Casos como los de AC Milan-Lille ya marcaron un precedente en este sentido y que por supuesto, desde Doha ya saben como manejar.
Leipzig y Salzburgo, propiedad de Red Bull en una misma temporada de Champions o Europa League, suponen el gran arma de Qatar para conseguir su cometido. Situar a un miembro lejano a la figura del Emir como mandamás de los Red Devils o fundar otro grupo empresarial distinto al QSI, las claves para que en caso de que los Glazer acepten la oferta, Paris Saint Germain y Manchester United puedan medirse en torneos UEFA. Un nuevo club estado viene en camino.