Aunque el 2024 seguramente se cerrará con saldo negativo para Boca Juniors, el plantel todavía tiene un objetivo crucial por delante. Es que aún no abrochó la clasificación a la Copa Libertadores 2025 y no puede permitirse perderse el principal torneo de Conmebol al igual que este año.

En ese contexto, y muy lejos de Vélez Sarsfield en la lucha por la Liga Profesional, el Xeneize tiene dos vías activas para conseguir el boleto: una de ellas es a través de la tabla anual, en dónde aún tiene por escalar, mientras que la otra es salir campeón de la Copa Argentina.

En este segundo torneo, Boca está en los cuartos de final, por lo que tres partidos lo separan de la próxima Libertadores. El rival será Gimnasia La Plata por un lugar en semifinales, dónde ya espera Vélez.

A pesar de que se especulaba con que el cruce entre los de azul y oro y el Tripero se jugara en plena ventana de Eliminatorias, AFA confirmó este lunes que el enfrentamiento se dará el 23 de octubre, con estadio y horario aún por definirse.

De esta manera, Boca evitará las ausencias de sus futbolistas internacionales y tendrá más de tres semanas de preparación para afrontar este compromiso clave de cara al resto del 2024.

Boca espera contar con un nuevo entrenador para la Copa Argentina

Aunque Mariano Herrón ya está al frente del equipo en su tercer interinato, la dirigencia pretende que este paso del entrenador de la reserva en la primera sea breve.

Para ello, el Consejo de Fútbol y Riquelme ya trabajan en contratar a un nuevo director técnico, con Guillermo Barros Schelotto y Fernando Gago como principales candidatos. Antes del cruce ante Gimnasia, Boca tendrá los compromisos ante Argentinos Juniors y Tigre, ambos por la Liga Profesional.