Hay carreras que siguen un guion previsible: explosión en Sudamérica, un paso por una liga “trampolín” en Europa y el salto a la élite. La de Wilmar Barrios rompió el molde. A priori, su escala en Rusia parecía ser una escala. Sin embargo, se convirtió en su lugar en el mundo. A sus 31 años y ya con más de seis temporadas en la espalda, el colombiano es figura, capitán y referente del Zenit de San Petersburgo, un club poderoso dentro de una liga aislada.
Para entender su presente, hay que viajar a su pasado en Argentina. Barrios y Boca fue una relación intensa y fugaz. Llegó a 2016 y en apenas 67 partidos, hasta fines de 2018, se convirtió en el eje del equipo de Guillermo Barros Schelotto. Pero su último capítulo quedó manchado: la final de la Copa Libertadores 2018 en Madrid. Con el partido 1-1 ante River, una expulsión en el tiempo suplementario lo dejó marcado a fuego. Tras aquel duelo, no volvió a vestir la camiseta del Xeneize.
Con 25 años y el Mundial de Rusia en la espalda, recaló en Zenit, sitio que muchos jugadores suelen considerar como una puerta de entrada a Europa. Inmediatamente se volvió titular indiscutido. Compitió en Champions League y Europa League, mientras que su valor de mercado ascendía a 20 millones de euros e invitaba a pensar en la llegada de un pretendiente.
Pero Barrios no estaba de paso. Se convirtió en un ciudadano más de San Petersburgo y se transformó en un personaje querido por todo Zenit. Hoy, con 31 años, acumula 235 partidos, tres goles y siete asistencias. Más importante aún, su palmarés en Rusia es demoledor: seis ligas, dos Copas de Rusia y cuatro Supercopas.
Cuando la geopolítica marcó un antes y un después para Barrios
Sin embargo, en febrero de 2022, cuando estalló el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, el fútbol también se vio afectado: la FIFA y la UEFA tomaron la determinación de aislar a todos los clubes rusos de las competencias internacionales. Y con tan solo 24 encuentros internacionales en Zenit, Barrios priorizó de todas formas su estadía en el club.
Incluso, esta situación le costó su lugar en la Selección. Pese a ser titular en las Copa América 2019 y 2021, dejó de ser convocado desde fines de 2023. La falta de roce internacional de primer nivel parece haberle pasado factura. Poco le importó y ese mismo año renovó su contrato con el Zenit hasta 2027, por lo que podría cumplir ocho años en el club.
Hoy, mientras el presidente de la UEFA, Aleksander Čeferin, reitera que Rusia no volverá a las competiciones mientras siga la guerra, y el de la FIFA, Gianni Infantino, expresa una lejana esperanza de un pronto regreso, Wilmar Barrios sigue haciendo lo suyo: recuperar el balón y ordenar la mitad de cancha.
