River Plate afrontó un partido realmente complejo contra Internacional de Porto Alegre en el marco de la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores de América.
Es que el visitante se plantó de buena manera en el Estadio Monumental, manejando la pelota por momentos y poniendo en aprietos al equipo que conduce Martín Demichelis.
De hecho, cuando se moría la primera parte, la visita halló la apertura del marcador mediante una pelota parada. Enner Valencia metió la cabeza y puso el 1-0 del Colorado.
Como consecuencia de ello, River salió con todo a jugar la etapa complementaria. Y, cuando todo era del anfitrión, Demichelis mandó a la cancha a Pablo Solari, de muy buen presente.
Y lo cierto es que, en la primera que tocó, Solari lastimó. A los 20 minutos del segundo tiempo, el atacante quedó mano a mano, cruzó el remate y le dio la paridad a River.