Boca Juniors venció 1 a 0 a Deportivo Cali en la última fecha de la Copa Libertadores. El único gol del partido lo anotó Alan Varela, quién sumó su primer grito tras 47 encuentros con esa camiseta. Triunfo y clasificación para el equipo de Sebastián Battaglia.
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Ganar para no sufrir. Ese era el lema del Xeneize que arribó a la última jornadade la fase de grupos con serias chances de lograr el pasaje a octavos de final. Del otro ladotenía al conjunto colombiano que había logrado vencerlo en su país y que hoy con un empate se aseguraba un lugar entre los mejores 16 equipos del continente. A pesar del repliegue casi absoluto, el local logró la diferencia gracias a un remate lejano de su mediocampista central.
Volvió a mostrar buenos pasajes. Desde aquella victoria ante Barracas Central, Boca acumula 8 partidos sin derrotas y varios puntos altos teniendo en cuenta rendimientos individuales. Con una solidaridad casi absoluta a la hora de recuperar la pelota, se volvió un equipo combativo y muy difícil de anotarle. Por cierto, quién lideró ese trabajo esta noche no juega en una posición habitual para dicha tarea.
No juega de defensor y tampoco es Alan Varela. El jugador en cuestión jugó gran parte de su carrera como enganche aunque en este equipo suele cumplir su labor principalmente como interno y eje en cada ataque del Xeneize. ¿Quién es? Nada menos que Óscar Romero, dueño de una zurda única pero también de un desgaste que puede resultar imperceptible.
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Si analizamos los números de todos los jugadores del local, ninguno ganó tantos duelos como el paraguayo (13) esta noche. Pero eso no es todo: tambiénfue quién más tocó la pelota, gambetas completó (5) y faltas recibió (4). La rompió.
