Se asomó al estadio Arthur Ashe, el de mayor importancia en el US Open, último Grand Slam del año, y la gente explotó. Lejos de la cancha, pero vivo en el corazón de cada fanático del tenis, Juan Martín Del Potro recibió la ovación más grande de la tarde en Nueva York e ilusionó a todos con su regreso al tenis tras una nueva y dura lesión.
El tandilense, que continúa recuperándose de su lesión en la rodilla, revolucionó Flushing Meadows y además formó parte de un entrenamiento único: peloteó nada menos que con John McEnroe, leyenda viva del tenis mundial.
Tras esto, la Torre de Tandil, en diálogo con ESPN, contó sus sensaciones de cara a su posible retorno al circuito, en el que cual no juega desde mediados de 2019. “Dentro de toda esta situación complicada, lo que siempre me hizo mantener de pie es verme cómo estoy jugando”, aseguró.
“Hoy rengueo, pero siento que el tenis me va a acompañar y que me está esperando para darme una nueva chance de hacerlo como yo quiero y no como pueda”, agregó.
Completamente sincero y a corazón abierto, el ganador del US Open 2009 y campeón de la Copa Davis con Argentina en 2016, confesó: “Es el partido más duro de mi carrera porque no sé cómo ganarlo todavía, pero lo importante es estar en partido, estar en carrera. De alguna manera sé que lo voy a lograr”.