Hay un jugador que es fácil de reconocer en un campeo de juego: Adama Traoré. Su potentoso físico hace diferenciarse del resto de sus colegas.

El jugador de Wolves -y compañero de Raúl Jiménez– fue buscado por equipos de la NFL durante su esadía en La Masía con el Barcelona.

Romain Saiss, también jugador del conjunto inglés, reveló una charla que tuvo con el Traoré: “Recuerdo haberle dicho que corría como un futbolsita estadounidese y me respondió que cuando jugaba en Barcelona, equipos de la NFL lo quisieron para el futbol americano”.

A su vez, en una entrevista para RMC Sport, agregó: “Tal vez tiene una sala de gimnasio en su casa, pero en el entreneminto, en cualquier caso, nunca levanta fierro. Es enorme y muy ráido”.