Brian Lozano fue, al igual que muchos, un joven soñador que cuando piensa en hacer carrera en el futbol también tiene el deseo de llegar a la selección. El Huevo pudo cumplir su sueño en 2015, año en que fue llamado para tener su primera experiencia en el combinado uruguayo.

Antes de llegar al estado de privilegio, el delantero de Santos Laguna hacía lo imposible para arrimarse hasta quienes hoy son sus compañeros de selección charrúa. En 2010, desató su locura cuando el plantel uruguayo retornó del Mundial de Sudáfrica.

"Me acuerdo que fui al Palacio Legislativo de Uruguay cuando el planel llegó de Sudáfrica, iba corriendo atrás del bus de la selección como un hincha más. Uno de chico miraba a los jugadores por televisión y ahora al tenerlos ahí al lado me hace mirar al espejo y decir 'lo que conseguí", comentó en una entrevista para ESPN Uruguay.

Sus actuaciones en el América hicieron que en 2015, Óscar Tabérez, entrenador de la selección mayor, lo convoque por primera vez a la absoluta. Ahí es cuando el atacante conoció personalmente a jugadores de tamaña talla como Edinson Cavani, Diego Godín, Luis Suárez, entre otros.

"Mario Rebollo, ayudante de Tábarez, se comunicó conmigo para decirme que me querían convocar. Después, ya en el Complejo Celeste, estar con las grandes figuras fue muy lindo. Recuerdo que me tocó sentarme al lado Cavani que, además de ser de los mejores del mundo, es una gran persona", comentó el Huevo.

A sus 26 años, quien acumula 13 goles en 33 partidos con la playera del cuadro lagunero en la última temporada, pretende seguir vinculado con la Selección de Uruguay, con el objetivo de ganarse un lugar entre los títulares para el Mundial de Qatar 2022.