Había llegado a Chivas como uno de los jugadores jóvenes con más potencial de todo el fútbol mexicano. Pero en el Rebaño Sagrado no pudo explotar todo su nivel y, tras dos años, el equipo de Guadalajara decidió darle continuidad en otro sitio.
Gael Sandoval fue una revelación en aquella Liga de Ascenso de la temporada 2015-16. Sus 35 partidos jugados repartiendo 7 asistencias con solo 20 años fueron trascendentales para que Juárez logre quedarse con el Torneo Apertura 2015. Aunque los de Ciudad Juárez terminaron cayendo ante Necaxa en la final por el ascenso, la sensación de que había un diamante en bruto estaba intacta.
Sandoval se transformó en una realidad cuando logró el Balón de Oro al novato del año de la temporada 2016-17, cuando ya se encontraba en Santos Laguna nuevamente, equipo dueño de su pase. Rápidamente los rumores de traspasos en varios clubes se dispararon y fue Chivas quién golpeó primero invirtiendo 3 millones de dólares por el joven jugador.
Después de su paso en las Chivas Rayadas alternando más malos momentos que buenos y siendo un jugador secundario en los ojos de los entrenadores, el volante acaba de ser prestado al Juárez, lo que es, quizás, su lugar en el mundo.
