Habiendo conseguido una ventaja más que positiva en la ida de las semifinales de la Copa de Brasil, Gremio encaró el encuentro de vuelta ante Atlético Paranaense con un mayor grado de tranquilidad.

Pese al resultado favorable logrado en el primer enfrentamiento, los comandados por Renato Portaluppi no supieron mantener el mismo y a los 49 minutos de la segunda etapa la serie estaba igualada en 2 (goles de Nikão y Marco Ruben).

Para empeorar las cosas, habiéndose cumplido hace segundos la hora de partido, Walter Kannemann vio la roja directa y fue enviado a los vestuarios antes de tiempo.

Las imágenes no dejan duda alguna: el defensor argentino llegó a destiempo y quien lo sufrió fue el volante Léo Cittadini, que luego de recibir la falta quedó tendido en el campo de juego.

Si bien los compañeros del ex San Lorenzo sostuvieron el resultado y llevaron la serie a los penales, allí la institución de Porto Alegre pecó de su falta de efectividad y quedó eliminado del certamen.