El Boca que ganó en Brasil ante Athletico Paranaense por Copa Libertadores mira al de hoy y no lo reconoce bajo ningún concepto.
Es verdad, el partido que hizo Huracán en el debut de ambos por la Superliga Argentina es digno de encuadrar, complicando mucho al rival.
Buena presión, presición en ataque y varias situaciones de gol que podrían haber significado la ruptura del marcador de manera temprana.
Se peleó mucho, se presionó y el Xeneize también tuvo las suyas a lo largo de todo el encuentro, sin ser efectivos en el último toque. Un puro ida y vuelta.
Fue un 0-0 final pero que dejó una moraleja importante: los empates también pueden ser partidazos. ¡Bien por ambos!