Toda una tormenta se ha vivido en los últimos días en el fútbol colombiano ya que hay una crisis institucional de proporciones históricas, la cual se agudizó por la pandemia del nuevo coronavirus y ha afectado a las dos máximas entidades que rigen el balompié nacional: Dimayor y la Federación Colombiana de Fútbol.

El pasado lunes, la Superintendencia de Industria y Comercio sancionó a la FCF tras encontrarla culpable del 'Cartel de las boletas', por la trama de la reventa de boletería para la eliminatoria al Mundial de Rusia 2018, que se destapó y dejó a muchos castigados, incluído el presidente de la FCF, Ramón Jesurún.

Ante esto, ya hay voces que piden la suspensión y salida de Jesurún de la Federación, incluido el Ministro del Deporte, Ernesto Lucena, quien afirmó: “Lamentamos profundamente que esto le pase al deporte colombiano. Tenemos en este momento dos opciones: la primera es recibir la notificación del fallo y en ese momento pedir a la comisión disciplinaria de la FCF que haga una investigación y, si encuentra mérito, suspenda a los del comité ejecutivo de la federación”.

Según los estatutos de la FCF, en caso de que se llegara a dar la salida de Jesurún quien lo reemplazaría en el cargo es el presidente de la Dimayor, actualmente Jorge Enrique Vélez, pero su continuidad no parece segura ya que sus problemas de gobernabilidad lo tienen en el ojo del huracán.

Cada vez más son más los clubes que se unen a la 'oposición' de Vélez y en los próximos días, en la Asamblea que definirá el sistema de campeonato y demás temas pendientes, los equipos pedirían su salida, lo cual dejaría sin ninguna cabeza visible al fútbol colombiano.