Este viernes 28 de octubre se disputó la gran final de la Copa Libertadores femenina, en el estadio Rodrigo Paz Delgado de Quito, entre Palmeiras y Boca Juniors; justamente las brasileñas se impusieron en el marcador gracias a un contundente 3-1.

Y es que las cosas iniciaron de muy buena manera para las paulistas, debido a que apenas a los 5 minutos de iniciado el compromiso, luego de un centro al área grande, y posterior jugada individual de Ari, la salvadora en las semifinales ante América, puso el primero de la tarde noche ecuatoriana.

Las Xeneizes estaban intentando aprovechar cualquier fallo en zona de mediocampo o de defensa de las brasileñas, situación que efectivamente se dio a los 13 minutos, por medio de Brisa Priori, ya que tras una pérdida de balón en la zona medular quedó prácticamente cada gol, y pese a que la guardameta no le dejó fácil la tarea de definir, al final solamente tuvo que empujar el balón tras un rebote.

También es importante decir que fue un entretenido partido, ya que las de Sao Paulo buscaban sostener y atacar las espaldas de las de Buenos Aires, y por su parte, las argentinas eran puro esfuerzo para aproximarse sobre el pórtico defendido por Jully.

Ya para el complemento, Cuando el cronómetro circulaba por el minuto 49, Byanca Brasil, aprovechó un centro goteado por parte de Bruna y, prácticamente sobre la línea de gol, empujó para ir dilucidando la victoria de las digiridas por parte de Ricardo Belli.

Finalmente, a dos minutos para completarse la hora de partido, Poliana, de nuevo, por la vía área y luego de un centro de tiro de esquina por parte de Andressinha, la defensora se impuso sobre sus marcadoras y puso el definitivo y lapidario tanto del triunfo.

Pero como la situación no terminaría ahí, ya en los minutos finales del compromiso, las vestidas de verde demostraron su dominio durante el juego y anotaron un cuarto tanto logrado por Beatriz, quien aprovechó la asistencia de Poliana para decretar el marcador final.

Con la situación así, Palmeiras que no perdió ni un solo partido de la competición, logró por primera vez un título de Copa Libertadores femenino y de esa manera la consagración número 11 para Brasil en 14 ediciones del torneo de clubes más importante de Sudamérica, a nivel de mujeres.