Que Germán Delfino es de los peores argentinos no sorprende a ningún hincha. No obstante, aún sorprende su nivel.

Este sábado, por la quinta fecha de la Superliga Argentina, el árbitro cobró un penal que solo vio él. Ni Darío Cvitanich estaba convencido.

Sobre el final del primer tiempo entre Racing y Godoy Cruz, al delantero le quedó el balón boyando casi en el área chica.

Sin embargo, en vez de rematar incómodo, sintió un toque en el tobillo y se tiró como nos zambullimos nosotros en verano con 40 grados de sensación térmica.

Se tiró tarde, todo desparrado ¡y Delfino cobró penal! Eso sí, estaba a dos metros de la jugada, mal parado no estaba.

Del penal vino el 2-1 de Racing de los pies de Lisandro López. Papelón de Delfino.