"¡Fournier y De Colo no la agarran!", fue una de las frases más resonantes de Sergio Hernández a sus dirigidos en el último Mundial de Básquetbol en China 2019. En aquel día, las figuras francesas del perímetro fueron anuladas por la defensa argentina, la clave para el pase a la final del certamen. 

Este lunes, Oveja no consiguió que sus jugadores le quiten el protagonismo a Luka Doncic y cayeron por 118-110 ante Eslovenia, que se presentó en el básquetbol olímpico por primera vez en la historia del país. El de Dallas Mavericks aportó 48 puntos, con 63% en tiros de campo, 11 rebotes y 5 asistencias.  El ex Real Madrid mantuvo el invicto de 14 partidos que tiene vistiendo la camiseta eslovena, luego de su título en el Eurobasket 2017 y en el último Preolímpico de Kaunas, en donde consiguió la clasificación a Tokio 2020 derrotando al local, Lituania. 

 

La producción en puntos de Doncic es la segunda mejor de la historia olímpica en un partido junto a la del australiano Eddie Palubinskas, ante México en 1976. El brasilero Oscar Schmidt, el máximo goleador histórico de la competencia, anotó 55 ante España en 1988. 

En el equipo argentino, Luis Scola fue de lo más destacado con 23 puntos, que le permitieron escalar a la cuarta posición de máximos anotadores olímpicos históricos, con 542, detrás del promio Schmidt, de Andrew Gaze y Pau Gasol. Facundo Campazzo se anotó con 21 tantos, 6 rebotes y 4 asistencias, mientras que Gabriel Deck anotó 17, con 7 tablas. 

 

El próximo jueves Argentina disputará la segunda fecha del Grupo C ante España y cerrará el sábado ante Japón, dirigido por el viejo conocido Julio Lamas. Para conseguir la clasificación a los cuartos de final deberán terminar la zona entre los dos primeros o ser uno de los dos mejores terceros.