Liverpool venció 2 a 1 al Tottenham, sigue en lo más alto de la Premier League con puntaje perfecto, Firmino convirtió un gol, pero...

El delantero debió abandonar el campo de juego antes del final por un tremendo golpe en el ojo.

Bueno, no fue exactamente un golpe. ¿Qué pasó? Jan Vertonghen le metió un dedo en el ojo y la imagen es durísima.

¡Por favor, cuanta impresión nos da!