En una semana, Mauro Icardi ha pasado de héroe a villano en Milán: Inter le sacó la capitanía y lo marginó del plantel.

En medio de este contexto, Wanda Nara, representante y esposa del goleador, es apuntada como una de las responsables de la tensa relación entre jugador y club.

Para colmo, este sábado a la mañana, el auto en que viajaban ella y sus hijos fue alcanzado por una piedra.

Así lo informó La Gazzetta dello Sport. Por fortuna, no hubo heridos ni consecuencias graves para los que iban en el automóvil.

Sin dudas, el clima no es el mejor en Milán.