El delantero mexicano sigue aportanto goles para el conjunto del Wolverhampton Wanderers Football, pero en esta oportunidad fue ante el Espanyol por la UEFA Europa League, donde protagonizó una jugada curiosa, rechazando el balón hacia atrás, que el arquero Rui Patricio por poco convierte en una jugada de gol en propia puerta.

Fue al minuto 31 de partido, cuando las acciones iban (1-0) a favor de los Wolves, cuando por el sector izquierdo, el atacante Raúl Jiménez rechazó el balón de manera incómoda hacia atrás, y Rui Patricio quiso despejar el balón sin dejarlo caer con su pierna izquierda, pero pifió. 

 

Afortunadamente el guardameta portugués pudo reaacionar a la siguiente jugada, tapatando el remate con su mano derecha, ya que podía haber significado la anotación de la igualdad y con ello, cambiar el  rumbo del partido. 

Los Lobos se llevaron una diferencia bastante abultada para cuando les toque visitar al Espanyol, ya que el conjunto catalán tendrá que anotar por lo menos cuatro goles y que no le conviertan ninguno, para al menos igualar la serie.