Iñaki Williams tiró el balón largo, puso la sexta velocidad y ya no quedó nada más que hacer a una defensa de Sevilla que, con el partido en desventaja de un gol a cero, había intentado adelantarse en busca del empate.

El delantero vasco no tiene nada que envidiarle a Usain Bolt. Y es que le tomó apenas nueve segundos desde que inició su corrida hasta que hizo impactar el balón con la red rival para liquidar las acciones en el complemento.

Previamente, en la primera mitad, Iñaki Williams había sido también el autor del tanto que abrió el marcador en favor del Athletic de Bilbao.

El triunfo del equipo vasco no permitió que Sevilla pudiera acortar la diferencia respecto del líder Barcelona y del escolta Atlético Madrid.