Hace tiempo que la directiva de Barcelona tiene dando vueltas en la cabeza la idea de buscar un competidor que potencie todavía más el rendimiento de Luis Suárez y en el presente mercado de pases parece haber apuntado a su compatriota Maxi Gómez.

Curiosamente, el uruguayo que marcó este viernes un gol en la derrota del Celta 4-2 ante Rayo Vallecano, estuvo de visita este fin de semana en la Ciudad Condal.

Y no se necesitó de un trabajo de espionaje para comprobarlo, porque fue el propio futbolista el que lo dejó ver a través de una historia que publicó en su cuenta de Instagram.

Maxi Gómez, de 22 años, tiene varios pretendientes en La Liga y el extranjero. Algunos clubes ingleses o chinos incluso están dispuestos a pagar los 50 millones de euros de su cláusula de recisión. Y es que sus números le avalan como uno de los jóvenes delanteros con más futuro.