Pobre. João Miguel Macedo Silva, el arquero del Guimaraes, no va a dormir más, o al menos por muchos días.
Pasa que su equipo ganaba de visitante ante el Frankfurt, y venía haciendo un buen partido, hasta que él se equivocó.
El arquero saltó a buscar un balón con una breve presión de un delantero rival, y el mismo se le escapó de las manos.
La acción terminó en gol en contra y para colmo, minutos después, los locales dieron vuelta la historia.
De igual manera, el consuelo del jugador está en que sus compañeros se hicieron fuerte y lo terminaron ganando 3-2, aunque no podían clasificar a la siguiente fase de ninguna forma.
+El insólito gol:
Por el lado del conjunto alemán, a pesar de caer derrotados, la ayuda del Arsenal que empató con el Standard Lieja fue suficiente para entrar en los dieciseisavos de final.