El partido iba 2 a 0. Liverpool ganaba con comodidad ante un debilitado West Ham. Sin embargo, el brasilero Roberto Firmino decidió ponerle un poco de picante a un encuentro que no tuvo demasiados sobresaltos y terminó con la victoria del local por 4 a 1.

 

Los londinenses la perdieron en la mitad de la cancha y, gracias a un pase largo, Firmino quedó frente al arquero. Cuando lo tuvo mano a mano, le metió un caño y definió con el arco vacío... ¡sin mirar!

Conocido por sus gestos "sobradores", el delantero se ganó el odio de sus rivales, que, de no jugar en una Liga tan leal como la inglesa, ya hubieran mediado con violencia a las actitudes del brasileño que compartirá ataque con Philippe Coutinho y Neymar en el próximo Mundial de Rusia.

Emre Can, Mohamed Salah y Sadio Mané, quiénes también estarán en Rusia, anotaron los goles restantes del Liverpool. Michail Antonio descontó para el equipo derrotado.