Ella es la estrella de la que se habla de este lado del mundo. Linda Caicedo, con relucientes 18 años (los cumplió el 22 de febrero), fue la figura en las tres grandes competencias a nivel selecciones que disputó en el año: la Copa América, el Mundial Sub 20 y el Sub 17, en el que justamente cayó en la final ante España. Fue elegida mejor jugadora y su apellido llegó hasta Europa. Y hacia allí partió.
La delantera ex América y Deportivo Cali ya estampó su firma y fue presentada oficialmente como la nueva estrella del Real Madrid una vez que cumplió la mayoría de edad. El Merengue, en cuanto al femenino se refiere, es un equipo que está dando aún sus primeros pasos. Se fusionó con el desaparecido Club Deportivo Tacón y tuvo su debut en la Primera en octubre del 2020.
Con el subcampeonato en el torneo de la temporada 20/21 logró meterse por primera vez en su corta historia en la Women's Champions League, aunque no logró la clasificación a los cuartos de final (obtuvo dos resultados históricos: empates con Chelsea y PSG y dos victorias ante el Vllaznia albanés).
En la actual temporada marcha segundo con 52 puntos, a cinco del poderoso Barcelona. Y, ahora, con su nueva estrella, quiere ir por más. Sobre todo porque el blaugrana es el gran protagonista de la Liga F, sumando siete ligas, 9 Copas de la Reina y tres Supercopas, además de una Champions.
Y tienen a su estrella, que lleva varios meses recuperándose de una rotura de ligamentos, la laureada Alexia Putellas, dos veces elegida mejor Balón de Oro y nuevamente nominada al premio The Best de la FIFA.
El 9 de enero, Barcelona se enfrentó al Real Madrid por las semis de la Supercopa y fue victoria culé. El próximo 25 de marzo se cruzarán por la Liga F, quizá con la presencia de la estrella del Barcelona, que el 30 de diciembre volvió a trotar (se lesionó el 5 de julio del 2022).
Linda Caicedo llegó al Real Madrid para darle un nuevo aire, de juventud, de picardía sudamericana, de gambeta, gol y talento. Pero también con la intención de comenzar a igualar el presente. El Merengue quiere más.
