Este martes se completó la segunda tanda de partidos de las Eliminatorias de Asia en el marco de la doble fecha FIFA. Por la segunda jornada de la clasificación, Emiratos Árabes Unidos e Irak igualaron 2-2 en el Zabeel Stadium de la ciudad de Dubai.
Un gol de Caio Canedo en la primera mitad puso en ventaja a los locales, pero los iraquíes consiguieron dar vuelta el resultado en el complemento gracias al gol en contra de Mohamed Omar Al Attas y al festejo de Ayman Hussein a los 44 minutos de la segunda mitad.
Los dirigidos por el neerlandés Dick Advocaat celebraban lo que era hasta el momento un importante triunfo que los dejaba en las puertas de, al menos, el repechaje. Pero todo cambió en el tercer minuto de adición cuando Ali Ahmed Mabkhout marcó el 2-2 definitivo.
Con este resultado, ambos equipos quedaron con tres unidades, a dos de Líbano que se ubica en la tercera colocación, detrás de Irán (10) y Corea del Sur (8). La frustración por no haber conseguido la victoria llevó a hinchas y jugadores visitantes a protagonizar escenas de violencia.
El medio Iraq Football Podcast reflejó en Twitter las imágenes de los incidentes: "Escenas increíbles después del juego. Los jugadores iraquíes Bayesh, Aymen Hussain y Alaa Mhawi salieron corriendo del autobús del equipo para atacar a los fanáticos iraquíes que esperaban fuera del estadio".
"Algunos fanáticos han estado gritando insultos a los jugadores mientras caminaban", identificó como desencadenante por el que Hussain arremetió primero. La policía local intervino en la pelea separando con motos, autos y caballos, mientras que el equipo entero salió del autobús para perseguir a los jugadores involucrados y llevarlos de regreso al vehículo.
