En el fútbol moderno parece imposible que un futbolista juegue toda su carrera en el mismo club. Muchos van a retirarse a ligas menores como Estados Unidos o la de China, donde tienen menos presión y pueden ganar algún dinero extra. Pero no siempre fue así.

Hace no mucho tiempo, el dinero no era todo en el deporte y muchos futbolistas jugaban por la camiseta que amaban. Aunque suene extraño, han existido futbolistas que han dedicado toda su carrera al mismo equipo. En el siguiente listado, una repaso con ídolos que nunca cambiaron sus colores.

Carles Puyol:

El defensor central jugó toda su carrera en el Barcelona. Debutó en primera en octubre de 1998 y se mantuvo en el equipo hasta el 2014. Fue campeón de Champions League en tres oportunidades.

Paolo Maldini:

El italiano le dedicó toda su carrera al Milan de Italia. Considerado como uno de los mejores defensores de la historia, estuvo en el club desde 1985 hasta el año 2009. En ese largo período ganó cinco Champions League.

Ryan Giggs:

El galés es uno de los mayores ídolos del Manchester United donde jugó desde 1990 hasta el año 2014. Fue uno de los abanderados durante la etapa de Alex Ferguson en el club y ganó la Champions League en dos ocasiones.

Ricardo Bochini:

El Bocha es el máximo ídolo en la historia del Club Atlético Independiente de Argentina. Se mantuvo en el equipo desde 1972 hasta 1991 y en todo ese periodo ganó cuatro Copas Libertadores de América. Hoy, el estadio del Rojo de Avellaneda, el máximo ganador de Copa Libertadores (siete veces), lleva su nombre: se llama Libertadores de América - Ricardo Enrique Bochini.

Francesco Totti:

El último caso rutilante de un futbolista que jugó siempre en el mismo club. Totti jugó siempre en la Roma de Italia, entre 1993 y el 2017, un total de 24 temporadas. Ganó una liga italiana y dos Copas Italia.