Para muchos nuestro auto representa uno de los más grandes orgullos, por eso aplicamos tanto esfuerzo y tiempo en mantenerlo siempre en condiciones óptimas para así poder disfrutar de él durante muchos años.

Es por eso que en ocasiones algo tan simple como los rayones sobre la pintura pueden llegar a arruinarnos el día. Sin embargo, esto es un problema que podemos solucionar por nosotros mismos y de forma fácil. A continuación hablaremos un poco más al respecto.

Un problema común

Los rayones sobre la pintura representan uno de los problemas más comunes que puede presentar nuestro automóvil. Sin importar que tan precavidos seamos al conducir, siempre existe la posibilidad de que suceda algún imprevisto que pueda dañar la pintura.

Existen muchas causas que pueden llegar a producir rayones sobre la pintura de nuestro auto, entre las más comunes tenemos:

-  Choques o roces leves con algún otro auto.

-  Superficies ásperas o con acabados irregulares.

-  Juguetes, herramientas, rastrillos, carritos de supermercado o cualquier otro objeto con bordes puntiagudos.

-  Ramas de árboles, arbustos, grava o rocas.

Identificar los daños

La mejor forma de saber cómo solucionar un problema es conocer a que nos estamos enfrentando y estar totalmente conscientes de todas las opciones con las que contamos. No existe un mejor escenario para poner a prueba este principio que cuando hablamos de autos.

Antes de aplicar cualquier producto sobre la pintura o llevar tu auto al taller, lo mejor es que hagas una revisión minuciosa de los daños por tu cuenta. En el caso de los rayones, es realmente fácil detectar su ubicación y la gravedad del mismo.

Existen dos tipos diferentes de rayones que puedes encontrar en la carrocería de tu auto. En primer lugar tenemos los rayones ligeros, estos suelen estar entre los más comunes y pueden ser reparados con facilidad sin necesidad de recurrir a especialistas o productos específicos.

Por otro lado, están los rayones profundos los cuales tienden a producir daños mucho más graves a la pintura del vehículo. Sin embargo, también representa un problema que podemos resolver por nuestra cuenta siempre y cuando tengamos los productos y las herramientas a la mano.

Principios para reparar rayones

A pesar de que reparar un rayón es un proceso bastante fácil y que por lo general no requiere del uso de herramientas especializadas o muchos conocimientos de mecánica, igual es un proceso muy preciso y meticuloso.

Antes de que siquiera te propongas a reparar un rayón por tu cuenta, es sumamente importante que tengas presente que este es un proceso que requiere tiempo y no te puedes apresurar. Una recomendación es que dejes este tipo de reparaciones para el fin de semana o en días en los que no tengas ningún compromiso.

Lo primero que debes hacer para reparar un desperfecto en la pintura es asegurarte de limpiar debidamente la parte dañada con abundante agua. Los restos de material son capaces de arruinar el trabajo o hacer que un trabajo luzca desprolijo, por eso hay que lavar bien el área afectada antes de trabajar.

Una vez termines de limpiar la zona donde se encuentra el rayón, es importante que tomes un papel de lija ligeramente húmedo y talles cuidadosamente toda la superficie. Una superficie limpia y lijada hace la diferencia entre un trabajo bien hecho y un intento mediocre de enmascarar un desperfecto en la carrocería.

Trucos caseros para reparar rayones

Si te has dado a la tarea de investigar un poco por internet, seguramente no habrás tardado en encontrar páginas y videos en internet donde muestran formas de reparar rayones usando algunos productos que tienes en casa. La verdad es que hay algunos principios científicos que respaldan algunos métodos.

Por ejemplo, hay sitios web en donde aseguran que se pueden reparar imperfecciones en la pintura usando pasta de dientes. Este método puede funcionar eficientemente, ya que el dentífrico sirve como un abrasivo que remueve capas superficiales de la pintura y permiten que se adhieran sobre el área dañada.

Otras páginas aseguran que en lugar de gastar dinero en cera o líquidos para rellenar, el gel que se utiliza para las uñas puede servir muy bien como capa base para la pintura. El principio científico que existe tras este argumento señala en que podría funcionar porque el gel para uñas sirve como superficie protectora para la carrocería y le brinda a la pintura una buena base donde asentarse.

Si bien este tipo de trucos caseros pueden ser de gran ayuda, es muy importante que tomes en cuenta que la mayoría de estos trucos solo funciona con rayones ligeros y no son del todo confiables. Lo mejor es usar los productos adecuados para cada reparación y usarlos siempre como recomienda el fabricante.

Formas para reparar rayones

Existen muchos métodos y formas para poder reparar un rayón sobre la carrocería que con algo de tiempo y práctica aprenderás a dominar. Cómo hemos señalado anteriormente lo primero es saber a qué nos enfrentamos. Una vez hecho esto, serás capaz de deducir como solucionar el problema.

En el caso de los rayones profundos, en muchas de las tiendas de autopartes es posible conseguir kits con todo lo que necesitas para reparar este tipo de desperfectos. Si bien pueden ser un poco costosos, por lo general no se requiere aplicar mucho para reparar un rayón, esto quiere decir que si lo administras bien un kit puede rendirte por mucho tiempo.

Si posees algunos conocimientos adicionales y cuentas con las herramientas adecuadas, es posible que puedas eliminar los rayones en la carrocería con algo de cera o incluso repintar la superficie dañada por ti mismo.

Lo más importante en estos casos es que poseas los productos, herramientas y sobre todo el tiempo suficiente para dedicarte a reparar un rayón. De no ser este tu caso, lo mejor es ser honesto contigo mismo y llevar tu auto a un taller especializado donde puedan ayudarte a solventar el desperfecto.