En momentos en los que se vive un fuerte debate sobre el rol de la mujer en la sociedad actual, la discusión alcanzó muchos apartados de la vida cotidiana y el deporte es uno de ellos. La presencia de porristas en los dos equipos del último Superbowl, que Philadelphia le ganó a New England, fue terreno fértil para el debate.
Tanto los Eagles como los Patriots llevaron a sus animadoras quienes, bajo el invierno del estadio techado de los Vikings enMinnesotta, no fallaron en sus tradicionales actuaciones. Aquello no pasó por debajo de la lupa de varios seguidores del evento.
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El debate lleva instalado semanas. En la Fórmula 1, por ejemplo, cambiaron a las tradicionales modelos que sostenían las sombrillas y los letreros con los números de los pilotos. Ahora ese rol lo cumplirán niños. Desde Liberty, empresa que ahora tomó el rol conductor de la categoría reina del automovilismo, “va en contra de las normas sociales modernas”, advirtieron desde la organización.
Las porristas de los Patriots también estuvieron presentes en Minnesotta(Getty)
Antes, en la misma NFL se discutieron las normas de pago a estas animadoras. Ahora no son pocos los que piden el fin de su existencia en el deporte. Incluso en el día del Super Bowl, al polémico presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se le vio con una agrupación de estas chicas.
Trump ogles scantily clad cheerleaders at Super Bowl party while the First Lady simply ignores him. (She’s gotten very good at that.) Pic @GettyImages