Después de sus goles contra Portugal, Diego Costa volvió a festejar este miércoles: ante Irán, el "Lagarto" anotó el 1-0 de España.

Sin embargo, el centrodelantero del Atlético Madrid tuvo mucha suerte: asistido por Andrés Iniesta, el atacante intentó acomodarse para rematar hasta que apareció Ramin Rezaeian.

El lateral izquierdo de Irán intentó robarle el balón, pero con la mala suerte que al rechazarlo le dio a la pierna de Costa y terminó en el tanto de La Roja.

Sin dudas, uno de los goles más fáciles que hizo en su vida el goleador de España.