Universitario de Deportes vive la peor crisis de su historia. La administración no podría estar más desprestigiada. Gremco la eligió y eso ya un mal comienzo. A eso hay que sumarle sus decisiones con respecto a la formación del equipo y el comando técnico y la resta de puntos por falta de pagos. 

En los últimos días, además de todo esto, otro problema se ha agregado. Y es que un grupo de jóvenes fue acusado de cometer una indisciplina. Obviamente, al inicio, se creyó en la versión institucional. Pasados los días las sospechas comenzaron. 

 

 

Primero, Soto y Carpio firmaron por Cienciano como si no pasara nada. Luego, Roberto Martínez anunció publicamente que otro de los supuestos involucrados no había dado su descargo. Iban a proceder a separlo como a sus compañeros. 

Este viernes, todo dio un giro inesperado. Y es que Luis Valverde dio su versión. Acusó a la dirigencia de encontrar una excusa para rescindir su contraro. Sí, lo mismo que pasó con Gregorio Pérez, pero ahora sin tanta trascendencia. 

"Ayer entregué mi descargo en las oficinas del club cumpliendo con el plazo. Hoy fui a entrenar y no me dejaron. Esto viene desde hace mucho tiempo. el Sr. Gonzáles (Francisco) me intenta obligar terminar mi contrato", tiró. "Está mañana he intentado trabajar y la seguridad del club me dijo que Roberto Martínez, Francisco Gonzáles y Ángel Comizzo, dieron la orden de que no se me permita el ingreso", concluyó.