Este sábado 16 de octubre, Glentoran recibió a Coleraine, por la novena fecha de la Liga de Irlanda; el partido terminó 2-2, sin embargo, la situación polémica del encuentro se dio cuando entre compañeros resultaron agrediéndose tras el empate final.

Aaron McCarey, arquero del Glentoran agarró a golpes a Bobby Burns, después de que la visita pusiera el tanteador igualado a dos goles. Por la situación, el juguete central del compromiso decidió mostrarle la tarjeta roja al guardameta del cuadro local.

Y es que cuando hay cronometro circulaba por el minuto 79, a los locales les anotaron el gol de la paridad; episodio que generó el mal humor por parte del cuidapalos, quien la emprendió en contra de uno de sus compañeros, que se encontraba lamentándose por la anotación en contra.

McCarey fue a donde estaba Burns, lo empujó, y ya en el suelo lo levantó de su camiseta e increpándole con furia sobre lo sucedido, lo tuvo sostenido durante un par de segundos, hasta que los demás compañeros fueron al apoyo del defensa, quien después fue arrojado al piso.

Este es uno de esos extraños casos qué sucede peleas entre compañeros, eso sí hay que reconocer que en esta oportunidad, la situación pasó de los insultos a las vías de hecho. Luego de ser expulsado del terreno de juegos, el arquero fue abucheado por parte de los aficionados locales.