Uno de los momentos claves del primer juego de las Finales de la NBA en la burbuja de Orlando, fue la salida en el primer cuarto del base esloveno Goran Dragic, producto del desgarro en la fascia plantar del pie izquierdo, y que lo mantiene en duda para el resto de los partidos de Miami Heat ante Los Angeles Lakers.

Y si a esta situación le sumamos la distensión en el hombro izquierdo de Bam Adebayo y los problemas que sufrió en su tobillo el escolta Jimmy Butler, la escuadra dirigida por Erik Spoelstra está en serias complicaciones de cara a enfrentar lo que resta de la definición.

Es que una lesión es capaz de cambiar para siempre la definición de un partido, de una serie de postemporada o de finales de la NBA, y por ello en Bolavip repasamos tres momentos donde figuras claves tuvieron que salir por molestias en el peor momento e influyeron en el resultado para sus equipos.

Lesiones que cambiaron la historia
 

El primer recuerdo de una figura influyente para su franquicia es el de Larry Bird, que en la década de los 80 le dio tres títulos a los Boston Celtics, convirtiéndoles en el equipo más ganador de la NBA; sin embargo, en la temporada 1988-89 empezó a dar muestras de que el final de su carrera estaba cerca.

A principios de ese certamen sufrió una lesión que lo sacó por tiempo indefinido, y si bien la franquicia de Massachussetts llegó a los playoffs, fue barrida en primera ronda por los Bad Boys de Detroit Pistons, consumando su peor playoffs en una década. 

Otra leyenda que sufrió una lesión en el momento menos indicado es el Cartero Karl Malone, uno de los que jamás pudo ganar un anillo de campeón, y tuvo la oportunidad dos veces con los Utah Jazz en 1997 y 1998, por lo mismo aceptó la oferta de Los Angeles Lakers en 2003 para volverlo a intentar. 

En noviembre de ese año, el ala-pivot sufrió una lesión en el ligamento medial colateral de su rodilla derecha, que lo tuvo dos tercios del certamen fuera, volviendo para el tramo final pero su aporte fue pobrísimo: en la definición con los Pistons, apenas promedió 5 puntos. Un desastre.

Pero si hablamos de finales, el caso más reciente de cómo una lesión cambió la serie fue lo ocurrido en el año 2019, cuando el ala-pivot Kevin Durant, que llegó en el 2017 a los Golden State Warriors, donde logró ganar dos títulos consecutivos, y buscaba el tricampeonato enfrentando a los Toronto Raptors.

KD venía de recuperarse de una lesión en su pantorrilla derecha, perdiéndose los primeros cuatro partidos de las finales, y en Canadá, con desventaja de 1-3, el entrenador Steve Kerr decidió arriesgarlo y ponerlo en cancha. ¿El resultado? Apenas duró 12 minutos en cancha y terminó sufriendo la rotura del tendón de Aquíles, que lo ha tenido fuera de circulación hasta el día de hoy. 

En los días que vienen, Miami Heat deberá hacer frente a las lesiones y posibles ausencias que puedan generar las mismas, para buscar revertir una serie ante los Lakers que, en el papel, parece estar muy difícil.