El Rebaño se coronó campeón de CONCACAF tras derrotar en penales al Toronto FC, luego de igualar a tres goles en el marcador global.

Orbelín Pineda abrió rápido el marcador en lo que parecía una coronación menos complicada, pero los goles de Jozy Altidore y Sebastián Giovinco obligaron al Guadalajara a tener que sufrir para obtener la corona.

Con el marcador empatado a tres anotaciones, la definición desde el punto penal resultó igual de cardíaca que el partido y Chivas terminó imponiéndose gracias a los goles de Alanís, Godínez, Pulido y Zaldívar. Por parte de Toronto, Jonathan Osorio y Michael Bradley erraron sus disparos.

Este campeonato de Guadalajara significa el segundo de la CONCACAF en su historia, tras haber ganado el primero en 1968.