Es verdad que todos hablan del colosal partido que realizó Jimmy Butler en el triunfo de Miami Heat por 111-108 ante Los Angeles Lakers para acortar distancias y ponerse 2-3 en las Finales de NBA; sin embargo, tampoco puede quedar en el olvido otro jugador que tuvo el mejor partido de su vida, el alero Duncan Robinson.

Durante los 37 minutos que estuvo en cancha, el jugador de segundo año se convirtió en el segundo máximo anotador de su equipo, convirtiendo 26 puntos, cinco rebotes y dos asistencias; pero donde estuvo su punto fue en los lanzamientos de tres puntos.

En esta instancia, Robinson tuvo un 53.8 por ciento de efectividad, anotando siete triples en 13 intentos, mostrándose como una fuerte alternativa ofensiva cuando los Lakers rodeaban a Butler. Más allá de esto, la actuación de Duncan lo mete oficialmente en la historia de las Finales NBA.

Con altura de leyenda
 

Gracias a sus siete aciertos de tres puntos, Robinson se convirtió en el tercer jugador en anotar más triples durante un partido de Finales, ubicándose detrás de Ray Allen, que con Boston Celtics anotó ocho de once intentos para vencer a los Lakers por 103-94 en el Juego 2. 

Sin embargo, el jugador con más triples en un partido definitorio fue el astro de Golden State Warriors, Stephen Curry, que en el Juego 2 de las Finales 2018 ante Cleveland Cavaliers anotó nueve de 17 intentos, con un porcentaje de efectividad del 52.9 por ciento.

Cabe señalar que en su primera participación en postemporada, con Miami Heat, Robinson ya registra un promedio de 11.75 puntos por partido, 2.85 rebotes, 1.75 asistencias y 0.7 robos, con un 42.9 por ciento en tiros de campo y un 39.6% desde los tres puntos.