Rodolfo Arruabarrena es el principal candidato para convertirse en nuevo entrenador del AEK de Grecia, club en el que puso fin a su aventura europea como futbolista.
Pasó todo demasiado rápido para el Vasco, que en 2008 dejaba la bella ciudad de Atenas decidido a volver al fútbol argentino tras un paso por Europa que incluyó al Villarreal y equipo griego. Y en 2011, gastados en Tigre y Universidad Católica sus últimos cartuchos como futbolista, se inició como entrenador precisamente en el equipo de Victoria que lo había sabido recibir en su retorno desde el viejo continente.
Arruabarrena es el candidato principal de la directiva del AEK, donde juegan Bruno Zuculini y Diego Buonanotte
Con el Matador sumó más elogios que críticas, y la prensa argentina perdió un poco el interés cuando le tocó cruzar el charco para trabajar en Nacional de Montevideo. Hasta que llegó Boca en 2014, club que le había permitido alcanzar la gloria máxima como futbolista. Allí, en el centro de los flashes, Arruabarrena mostró flaquezas que no lo dejaron bien parado y en situaciones muy particulares, como la recordada noche del gas pimienta en el Superclásico de Copa Libertadores, no actuó a la altura de las circunstancias, viéndose superado por el marco.
Pero también ganó, un título de Primera División y una Copa Argentina que lo mantuvieron en su puesto para el inicio de la nueva temporada. Sin embargo, en Boca le tuvieron poca paciencia al inicio de la misma y, tras una seguidilla de bajos rendimientos, dispusieron su salida para dar llegada a Guillermo Barros Schelotto.
Y como todo pasa tan rápido para Arruabarrena, unos meses más tarde surgió ésta posibilidad de regresar al club que abandonó en 2008, ahora como entrenador. Porque el Vasco ya se reunió con dos representantes del AEK y en Atenas aseguran que es el principal candidato, por lo que sólo resta llegar a un acuerdo contractual.
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